Lograr cumplir las demandas entre tu trabajo y el resto de tu vida puede parecer difícil. Mucha gente pone esfuerzo en horas extras o usando sus smartphones para mantener la comunicación cuando no pueden estar físicamente en el trabajo.
Aún cuando no tienes mucho control sobre las horas que trabajas puedes preguntarte a ti mismo: ¿De qué otras maneras estoy disfrutando mi vida?
Busca enfocar tu tiempo y atención en las cosas que puedes controlar. Aquí te presentamos 5 maneras para mejorar el balance vida – trabajo en tu rutina diaria
1. Planifica tiempo extra en tu agenda
Cuando planifiques tu semana, incluye en tu horario tiempo con tu familia y amigos y actividades que puedan ayudarte a recargar energía: Si una cena en la noche con tu pareja o un juego de fútbol con tus amigos está en el calendario, tendrás un incentivo extra para manejar tu tiempo efectivamente y así no tener que cancelar dichas actividades.
“Cuando existe tiempo inactivo o extra en nuestro calendario, este tiende a ser desperdiciado y terminamos perdiendo horas valiosas con nuestros seres queridos”
2. Deja las actividades que agotan tu tiempo o energía
Muchas personas malgastan su tiempo en actividades o personas que no agregan valor, por ejemplo, pasar mucho tiempo con tu compañero de oficina que constantemente está criticando y creando rumores de los demás.
Consejo: Identifica las actividades que no desarrollan tu carrera o vida personal y minimiza el tiempo que gastas en ellas. Incluso, pudieses ser capaz de irte más temprano del trabajo si limitas el tiempo que pasas en Facebook y Twitter, chequeando tu cuenta bancaria o haciendo llamadas personales.
“A menudo consumimos nuestra energía en hábitos que nos hacen menos eficientes sin darnos cuenta”
3. Repiensa tus diligencias
Considera si puedes contratar a alguien para que lleve a cabo tareas o mandados del hogar que pudiesen estar consumiendo parte de tu tiempo. ¿Qué tal ordenar el mercado online y hacer que llegue a tu casa? ¿Contratar a alguien para que recoja la ropa en la lavandería? ¿Pagar tus servicios de luz, teléfono, agua, etc. online? Incluso si tienes un presupuesto ajustado descubrirás que el tiempo que ahorrarás lo hará valer.
4. ¡Ponte en movimiento!
Es difícil hacer tiempo para el ejercicio cuando tienes una agenda apretada, pero este pudiese ayudarte a ser más responsable con tus tareas impulsando tu energía y habilidad para concentrarte.
Investigaciones demuestran que el ejercicio ayuda a que estés más alerta y tu mente más clara, además te hace sentir bien contigo mismo. Aún cuando no tienes el presupuesto o tiempo para un gimnasio, puedes dedicar unos minutos diarios en tu casa a ejercicios menos complejos o a trotar en un parque cercano.
5. Recuerda que un poco de relajación tiene grandes frutos
No asumas que necesitas hacer grandes cambios para lograr un mejor balance en tu vida. Traza metas realistas, como irte de la oficina temprano una vez a la semana.
Lentamente construye más actividades en tu horario que son importantes para ti. Puedes empezar a tomar una hora a la semana para tu hobby por la fotografía o planificar una escapada de fin de semana con tu pareja una vez al año.
Incluso durante un día ajetreado puedes tomar 15 minutos para hacer algo que recargue tus baterías. Toma una ducha, lee una novela, sal a caminar o escucha música.